Navegando: Guillermo “El Chacal” Rigondeaux

En cada pelea de las pocas que logra realizar en esta etapa de su carrera Guillermo Rigondeaux. Surge de inmediato una enorme ola de críticas y loas en relación a la pelea a través de las Redes Sociales. Unos, demeritan al rival de turno, otros, se apegan al trillado asunto de su estilo inclinados mas porque no logran captar el verdadero talento que encierra. Y los más sagaces, se diluyen en un sinnúmero de pretextos que, nos dejan la sensación de que ninguno está dispuesto ya sea por cuestiones nacionalistas o por simple desconocimiento del arte de fistiana, a brindarle todos los méritos que el cubano Rigondeaux merece. Luego, cuando analizamos todo en un contexto más general en el que mezclamos a sus seguidores, y a también a todos aquellos que aborrecen lo que Rigondeaux hace dentro de un cuadrilátero. Terminamos preguntándonos, ¿Como alguien pueda dudar del poder de convocatoria de Rigondeaux como boxeador, ya sea para mal o para bien? Las Redes Sociales, los Foros y los websites, se inundan de comentarios en contra y a favor y eso, en nuestros ojos, sencillamente se traduce en popularidad. Promocionalmente hablando, Rigondeaux es el sueño dorado de cualquier promotor. Cada una de sus peleas, generan unas polémicas interminables en las que seguidores y detractores, se enzarzan en luchas y diatribas que duran días y hasta meses, discutiendo sus virtudes para unos, y sus defectos para otros. Es asombroso como sin contar Rigondeaux con una maquinaria mediática a su disposición, pueda generar tantos hits y tantas reacciones a favor y en contra. Para buscar el origen de todo esta parafernalia que gira en torno al cubano, debemos trasladarnos hasta los días posteriores en lo que Rigondeaux, derroto de forma inobjetable al que muchos llamaban el sucesor de Manny Pacquiao, el “Filipino Flash” Nonito Donaire. Bob Arum el magnate de Top Rank, ahora sabe que lo que dijo en relación a Rigondeaux en esos días, lejos de convertirse en una ignominia, termino siendo la base de lo que ahora vemos en términos publicitarios en referencia al cubano. Anoche, Rigondeaux termino otra de sus peleas con un KO contra Jazza Dickens en tan solo dos rounds. Luego de destrozarle la mandíbula, producto de uno de los pocos golpes que recibiera el peleador ingles. De inmediato, el resorte que esta siempre listo para lanzar los improperios que sus detractores utilizan, se disparo para asomar lo que desde hace rato se viene argumentando y que, ha puesto al cubano dentro del listado de los mejores peleadores de esta época. Ya no se trata de sus habilidades, porque parece que paulatinamente, aquellos que se negaban por caprichos personales o prejuicios adquiridos, están cediendo una parte y aceptan a regaña dientes, que el talento siempre estuvo allí. Ahora, se recurre a la calidad de sus oponentes y en ese pecado, llevan la penitencia. Pues es absurdo exigir que haya mejores rivales, si los que están supuestos a ser los rivales naturales de Rigondeaux, por una u otra razón, han decidido no hacerle frente. Todo esto, nos trae de regreso a lo que expone el titulo de este tema. Rigondeaux se ha convertido en un imán como figura deportiva, y es un boxeador que posee los dos polos en niveles extraordinarios. Unos se apegan a sus virtudes y le admiran, y otros, apoyados en “frases” prefabricadas por Promotores y las empresas de TV, lo rechazan lanzando sus dardos en contra del peleador cubano. Guillermo Rigondeaux, es un tema permanente de debate en Redes Sociales, Foros y sitios donde el boxeo tenga un espacio. Aunque parezca contradictorio, es un hecho que es eso lo que buscan todos los involucrados en este negocio llamada boxeo, la popularidad buena o mala es una sola. Lo que no midieron aquellos que lanzaron esa campaña negativa en contra de Rigondeaux, es que ese alud se haya virado en su contra, y en estos días, se termine hablando mas de Rigondeaux por una u otra razon, que de aquellos que son las supuestas ‘caras del boxeo” Lo bueno de todo esto, es que existe una posibilidad real de que las peleas que debe Rigondeaux hacer contra los rivales naturales en su peso, se terminen concertando pues, quienes manejan este asunto, están conscientes que esa popularidad con la que Rigondeaux cuenta…Ciertamente cuenta y mucho cuando de dólares se trata. El resto es un trabajo sencillo, ya cuando el cubano tenga en frente a los rivales adecuados, terminaran quienes ahora no lo hacen, por darle todo el crédito que merezca si es capaz de derrotarlos como desde ya, nosotros sospechamos que indefectiblemente sucederá.