El invicto japonés Junto Nakatani (31-0 con 24 nocauts) debutará en el nuevo peso enfrentándose al invicto Sebastián Hernández (20-0 con 18 nocauts), un rival que llega sin derrotas y con hambre de protagonismo.
Lejos de tratarse de un trámite, el combate representa un examen clave para medir hasta dónde puede llegar el japonés en una división dominada por nombres de primer nivel. Consciente de ello, Nakatani ha dejado claro que su foco está plenamente en superar este desafío ante el mexicano afincado en Estados Unidos, sabiendo que un tropiezo podría frenar un futuro choque con Inoue.
Tengo que demostrar que soy el mejor en peso supergallo y para lograrlo tengo que vencer al chico que todos dicen que es el mejor, y ese es Naoya Inoue”.
JUNTO NAKATANI
Me doy cuenta de que es una pelea que todo el mundo quiere ver y eso es una fuente de motivación para mí”.
Nakatani se encuentra ante una de las etapas más determinantes de su carrera. Tras dominar con autoridad el peso gallo, el japonés ha decidido dar un paso adelante y subir al peso súper gallo dominado por su compatriota Naoya Inoue.
Su próximo compromiso, este fin de semana en Arabia Saudita, no es solo un cambio de división: es una declaración de intenciones en donde peleará junto a sus compatriotas en la velada denominada “Ring V Noche de Samurais“.

En la misma cartelera de Riad, Naoya Inoue volverá a ser el centro de todas las miradas al defender sus títulos indiscutidos del peso súper gallo frente a Alan Picasso. Mientras Inoue consolida su reinado, Nakatani observa, construyendo su propio camino con la vista puesta en el futuro.
Aunque el enfrentamiento entre ambos japoneses no es inmediato, la posibilidad de un choque en 2026 comienza a tomar forma como uno de los grandes combates que el boxeo puede ofrecer. Para que ese escenario se haga realidad, Nakatani sabe que debe demostrar primero que pertenece a la élite del súper gallo. Su pelea ante Hernández es el primer paso de un recorrido que podría desembocar en un duelo histórico entre dos de los mejores boxeadores japoneses de la era moderna.
Por ahora, el presente manda. Arabia Saudita será el escenario donde Nakatani deberá confirmar que su salto de categoría no es solo una apuesta, sino el inicio de un nuevo capítulo rumbo a la grandeza si logra derrotar el próximo año a Naoya Inoue siempre que este también cumpla y venza al joven mexicano Picasso.



