
Omar Chávez anunció hace unas horas que se retirará del boxeo profesional después de perder por segunda ocasión ante Jorge ‘Maromerito’ Páez. Y aunque momentos después rectificó y cambio su decisión, es un hecho que el menor de la dinastía Chávez está muy cerca de colgar los guantes.
La carrera de Omar inició con grandes expectativas; se puede decir que su futuro era mucho más promisorio que el de su hermano Julio César; sin embargo, la muerte de Marco Nazareth después de combatir contra Chávez fue un suceso que cambió la vida de manera definitiva del ‘Businessman’.
Omar Chávez. Notifight
La desgracia de Omar inició el 18 de julio del 2009, el tapatío Marco Nazareth era su rival. El pleito aunque solamente duró cuatro rounds fue muy violento. La contienda entre ambos tenía un antecedente, pues meses antes se habían encontrado en un cuadrilátero y la decisión fue un empate muy controvertido que favorecía a Omar, para mucha gente esa noche había sucumbido uno de los ‘Hijos de la Leyenda’, pero los jueces vieron otra cosa.
Después del combate, Marco fue llevado a un hospital, debido a que se desplomó luego de los golpes que recibió esa noche. Los esfuerzos de los médicos que lo atendieron fueron inútiles solamente y cuatro días más tarde falleció de una hemorragia cerebral.
El hecho de que un boxeador termine con la vida de otro púgil es un trauma que difícilmente se supera y más aún cuando Omar apenas contaba con 19 años de edad… estaba apenas en el inicio de su carrera.
El pugilismo de paga está repleto de esta clase de historias y la mayoría de ellas terminan con la carrera del otro boxeador que se ve involucrado en la desgracia. En alguna ocasión Gabriel Ruelas, quien era considerado el sustituto de Julio César Chávez en el boxeo mexicano, enfrentó al colombiano Jimmy García, el 6 de mayo de 1995 en Las Vegas, Nevada y desafortunadamente el sudamericano perdió la vida por los golpes recibidos.
De manera literal, es noche fue el fin de la carrera de Ruelas, pues hilvanó una serie de derrotas de manera consecutiva hasta que dijo adiós a los encordados. El nacido en Jalisco comentó fuera de micrófonos que le era imposible combatir, pues cada vez que quería golpear a un oponente, veía la cara de García e instintivamente se detenía con la finalidad de no lastimarlo. Así como él, otros púgiles han tenido que decir adiós de manera anticipada al cargar en su historial con la muerte de un oponente.
Se retira el primero, sera la misma historia con el mayor??????? No lo creo. Pobre Omar, la verdad lo vi muy temeroso en la pelea, pero jamas pense en su trauma frente a Nazareth. La verdad que si puede ser cierto que Omar no suelte la derecha por eso, sencillamente la tuvo guardada toda la pelea. saludos mis compas