El jab es para muchos el golpe básico y crucial, la base del boxeo.
Es la primera arma ofensiva que se aprende en el gimnasio, el primer fundamento básico innegociable de esta historia.
Gracias al jab se mide la distancia con el oponente convirtiéndose, por tanto, en un mecanismo defensivo de gran valor.
Un jab firme y potente separa y distancia al que lo emplea del rival que lo padece. Le permite dominar el ring y preparar el momento idóneo para el ko.
A lo largo de la historia, grandes exponentes de este deporte han destacado por el uso magistral de esta herramienta. Es una clasificación más como tantas otras, como siempre con el máximo cariño y respeto para todos los lectores y aficionados de este deporte.
10. Willie Pep
Para muchos, yo me incluyo, este boxeador es uno de los diez mejores boxeadores de todos los tiempos. No hablaré de sus logros pugilísticos que ya mencioné en su momento en el artículo de “Los 30 mejores boxeadores de todos los tiempos“. Pero si hablaré de su jab, un directo eléctrico con una precisión sublime con el que se apoyó a lo largo de su carrera.
Pep ha sido uno de los mejores boxeadores defensivos de la historia en un periodo donde el boxeo era mucho más duro que en la actualidad. Fue este directo, acompañado de su excelente juego de piernas, la base indiscutible del éxito que acompañó a este boxeador a lo largo de su carrera.
9. George Foreman
La perfección de su jab quedó retratada con aquel impresionante directo con que derrotó a Michael Moorer.
Ese uno dos alcanzó el cenit aquella noche majestuosa donde el bueno de George condenó a Moorer dejándolo tendido en el suelo con los ojos vidriosos.
Historia del boxeo, para enmarcar.
8. Ricardo López
El mexicano es, sin duda, uno de los mejores boxeadores de la historia. Boxeador calmado, frío y analítico con un nivel técnico muy por encima de lo normal. Poseedor de un jab excepcional de la sublime escuela mexicana.
A pesar de su elevado nivel de IQ, el Finito jamás rehuyó una batalla y supo fajarse cuando la ocasión lo requería, pero fue el jab el golpe que le dio siempre el mejor resultado.
7. Ike Quartey
Este peso welter fue campeón del mundo en un momento en que grandes boxeadores competían dentro de su categoría: Trinidad, De la Hoya o Mosley, entre otros.
El apelativo de Quartey fue “bazoka”, así que imaginen ustedes como pegaba. Su jab era seco, podía clasificarse incluso como impactante. Aquella mano izquierda era como un martillo que daba golpes sordos. Si alguno tiene dudas al respecto que le pregunte a Óscar de la Hoya que cayó al suelo en aquel inolvidable combate frente al africano.
6. Joe Louis
El directo de izquierda perfecto, sublime y preciso era el de Joe Louis, para mí, el mejor peso pesado de todos los tiempos.
Era un jab potente, bien dirigido, que mermaba y destruía al oponente.
Con la derecha más o menos igual, para qué lo vamos a negar. Mando al hospital a muchos boxeadores gracias a esos dos misiles que tenía el norteamericano. La derecha a Schmeling en el segundo combate es legendaria.
5. Floyd Mayweather Jr.
Preciso, veloz y dañino, así era el jab del pretty boy con el que derrotó a Diego Corrales.
Los años y las lesiones de manos le obligaron a perfeccionar este recurso que terminó por usar sobre todo a nivel defensivo. Pero ya no era el pretty boy de antaño, era Money, una versión madura de lo que había sido antes.
Su jab de izquierda era sublime y la derecha de contra igual. Un fenómeno en la parcela defensiva.
4. Muhammad Ali
Quizás fue Ali el poseedor, el dominador del jab más imitado. Ese directo puntilloso que acompañaba aquel “vuela como una mariposa y pica como una abeja”. Ese uno dos con que derrotó al bueno de George en aquella noche de marras.
Ese uno dos que casi destroza la cara de Frazier. Ese jab era, junto a su juego de piernas, su mayor sello de identidad dentro del ring.
3. Thomas Hearns y Sugar Ray Leonard
El primero tenía un relámpago en la mano izquierda. Uno de los brazos más largos que han pasado por su categoría. Y esa mano derecha escalofriante con que mando a la lona a Roberto Duran. Electricidad pura.
Leonard, sin embargo, tuvo uno de los jab más rápidos y espectaculares que se recuerdan. Sus golpes con ambas manos causaron sensación en los 80.
2. Carlos Monzón
El campeón argentino usaba a la perfección el jab tanto en la parcela defensiva como la ofensiva. No era el más rápido como Hearns, o como el de Sugar Ray Leonard, pero era una herramienta bestial que usaba de forma analítica para derrotar a sus rivales.
1. Sugar Ray Robinson
El mejor boxeador de la historia iba acompañado del mejor jab que yo he podido ver. Especialmente incisivo cuando boxeaba hacia atrás conservando la potencia de pegada hasta el último extremo.
Esa herramienta supuso un martirio para muchos de sus rivales como el bueno de Jake La Motta.
Dejar fuera de juego de esta ecuación a tantos y tantos maestros me parece delicado e injusto, pero no todos pueden entrar.
Si fuera una clasificación de los mejores ganchos al hígado, pues tendríamos a Julio Cesar Chávez en el primer puesto sin lugar a dudas, pero eso será para otra ocasión.
Espero que haya sido de su agrado.
Marcos Nogueroles Hernández
3 comentarios
Y larry holmes?
Si fuera Pilatti ya sabemos a quien pone como N⁰1 a ese que tantas e incontables notas le dedica a diario 🙂
Demasiado personalista
Done están Mano de piedras, Julio César, Tyson y tantos otros?